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publicado el 13 de enero de 2010

"La atmósfera es una cosa que no está en el set"

Charlamos con Elena Anaya y Gabe Ibánez en el marco del Festival de Cine Fantástico Sitges 09. Presentan el thriller psicológico Hierro, un estimable filme que relata la odisea de Maria, una bióloga marina que pierde a su hijo Diego, en extrañas circunstancias, en el trayecto de un ferry hacia la isla de Hierro. El filme de Gabe Ibañez sorprende por su poética visual y un protagonismo de la naturaleza que nos podría evocar a filmes como Picnic en Hanging Rock de Peter Weir o incluso La Aventura de Michelangelo Antonioni. Cine español de género con un acabado preciosista y una idea del horror en el que los elementos de la naturaleza adquieren un rol amenazador que también impregna a los nativos de la isla.

Lluís Rueda | Hierro parece muy influida por La Aventura de Antonioni o por Stromboli de Rosellini, con máximo protagonismo del personaje interpretado por Elena y del paisaje.

Gabe: La película utiliza el paisaje como un elemento psicológico, símbolos como los pájaros o el agua. El protagonismo lo tiene un personaje único enfrentándose a sus miedos y sí, creo que eso le concede un estilo muy clásico, quizá un poco en desuso pero ideal para las características del thriller psicológico que proponemos.

Elena, ¿qué te atrapó del proyecto?

Elena: Para mi entrar en el proyecto fue un reto enorme. Yo no conocía a Gabe, pero tras charlar dos horas con él me enamoré de los detalles del film. A veces echo en falta esa interactividad, ese ejercicio de generosidad del director para trabajar en equipo, hay directores muy crípticos, en cambio Gabe es absolutamente comunicativo. Me explicó su idea del filme con una gran cantidad de apoyo visual, fotografías para componer la atmósfera que perseguía.
Gabe: De hecho llegué a ponerte deberes...
Elena: Muchos. Hacer fotos y buscar los elementos extraños...
Gabe: Sí, hay una manera habitual para implicar al actor, pero en este caso era primordial que el personaje de María se fundiese con el paisaje, su extraordinario y más importante compañero de reparto. La atmósfera es una cosa que no está en el set y el lenguaje cinematográfico suele tener bastante de artificio. Elena debía aprender su papel y otras características como el tipo de fotografía que íbamos a utilizar, el sonido, la paleta de colores y que buscábamos con todo ello.
Ella sabía tanto de la película como yo o el director de fotografía. Fue nuestro aliado técnico.

¿Te inspiraste en algún personaje concreto para dar vida a María?

Elena: No suelo hacerlo, me encantaría dominar esa técnica pero no es el caso. Busco elementos para construir un perfil como alguna lectura tormentosa que me hizo llegar Gabe, ja, ja. Ese libro que me prestaste me arruinó las vacaciones, era durísimo.
Gabe: Era 'El año del pensamiento mágico'.
Elena: Un dramón.
Gabe: Es bueno construir utilizando referencias de otros medios, más allá del propio cine que puede ser contaminante o perjudicial. Yo utilizo mucho la fotografía y las novelas. Por ejemplo novelistas como Jim Thompson con esos personajes dulces que pueden convertirse en locos o cabrones.
Es inevitable mimetizar el material de viejas películas, pero procuro evitarlo para reforzar un estilo propio.

Elena, ¿es gratificante ser una heroína del cine de suspense?

Elena: No me suelo casar con ningún genero en especial. Hay excepcionales thrillers y grandes comedias , también me gusta la comedia. A mí me encanta perseguir esa excepcionalidad. Por ejemplo, lo próximo será un drama romántico con Julio Medem que como puedes imaginar será poco convencional.

Es la segunda vez que te conviertes en una mamá con trauma...

Elena: … (Mira pensativa)

Van Helsing

Elena: Ja, ja... No, he interpretado a varias. En Van Helsing recuerdo que estaba con las otras dos vampiras y comencé a llorar... Me decían, ¿que te pasa? Pues nada, que se nos acaban de morir 1500 hijos, ja, ja. Se me caían hasta las lentillas, ¡que congoja!
No, en mi primera película, África, yo tenía dieciocho años y ya era madre de un hijo de cuatro o cinco años. De madre en ficción tengo experiencia, ja, ja.


¿Y cómo fue el trabajo con el niño que interpreta a Diego?

Gabe: Al principio pensábamos que sería un desastre, pero resultó muy profesional. En ocasiones sorprendía, como en una secuencia clave en la playa en que consiguió una expresión grotesca muy desestabilizadora. Era una sonrisa maléfica. Pero vaya, yo no tengo nada que ver, al niño lo eligió Elena.
Elena: Me trajo tantos niños al casting que hasta cogí piojos, lo que no me había pasado en mi vida.

Menos mal que tenías experiencia como mamá...

Gabe: Ja,,ja
Elena: Fui difícil la elección, pero hubo feeling. Mira, que una película quede bien tras tantas decisiones a mi me parece un milagro. Impostamos situaciones límites para ver cómo reaccionaban, era simular lo que realmente podía pasar en el rodaje
Gabe: No, cuando los niños trabajan en esto tienen una percepción rara, se asustan.
Elena: Si hasta me asusto yo...
Gabe: A veces da reparo, te preguntas hasta donde le presiono, no debo. Es peligroso, los niños no son actores, no actúan.
Elena: Cuando les explicas que es un juego todo funciona mejor y son perfectos compañeros. Este fue un valiente y acabamos encantados.

Gabe, tú que vienes del mundo de los efectos especiales, ¿cómo la construiste la espectacular secuencia inicial del accidente en coche?

Gabe: No teníamos muchos medios. Se hizo volteando el vehículo y con ventiladores. Es más sencillo de lo que parece aunque luego tiene bastante postproducción, hubiéramos necesitado un aparato para hacer giar el coche en el aire y mantener el racord del cabello etc..., pero no había dinero para eso. Lo suplimos moviendo la cámara con energía. La película es muy sencillita de medios en general.
Pero lapelícula está llena de efectos pequeños, acicates oníricos integrados e la historia.
A mi me resulta fácil administrar los FX en pequeñas dosis porque es una herramienta natural que uso como un recurso más. Me gusta probar cosas, considero que esos toques tétricos bien administrados quedan muy bien.

Hierro es tu ópera prima, ¿miedo a no escoger bien en una próxima película?

Gabe: Miedo a no poder hacerla, ja, ja... El cine es una incertidumbre total
Elena: He de decir que Gabe lleva un més y medio en Los Ángeles escuchando proyectos. Se lo rifan en Hollywood.
Gabe: Realmente salen propuestas similares al espíritu de Hierro, pero a mi me gustaría cambiar de registro y hacer una película de Ciencia Ficción. No tengo ganas de hacer otro thriller en este momento. Estoy vendiendo el proyecto de una película realista sobre robots, toca el tema de la singularidad, cuando la inteligencia artificial supera al hombre. Un concepto muy metafísico.

¿Y tú Elena? ¿Te vuelves a ver en Hollywood?

Elena: Me estoy leyendo papeles de todo tipo y los guiones no son muy buenos, no porque sean americanos, creo que Hollywood todavía propone films de interés a pesar de las críticas. Si hubiera un papel que me seduciese volvería a Hollywood o a París, donde también rodé en su día muy a gusto. Me ha de enamorar la historia, el guión, el director...
Gabe: De cualquier modo creo que Elena habla bien del cine americano de espíritu más independiente. Quizá el cine masas ha bajado un poco su calidad respecto a épocas pretéritas. En Estados Unidos las estrellas tienen demasiado peso y se tira demasiado de clichés, en cambio, en Europa, contemplamos un cine más férreo en la producción y en la dirección.


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