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sitges 2012 - películas

publicado el 16 de noviembre de 2012

Pau Roig | La tercera película del realizador británico Pat Holden se inspira (presuntamente) en hechos reales para mostrar el particular descenso a los infiernos de una familia de clase media que tras mudarse a la casa que siempre habían soñado será víctima de los ataques cada vez más virulentos de un espíritu maligno. Destaca por su aplicado trabajo de ambientación y dirección artística –la acción transcurre en 1974– y prescinde de sustos fáciles y de golpes de efecto en busca de una plausibilidad y de una profundidad psicológica hasta cierto punto inédita en las producciones sobre casas encantadas y fantasmas vengativos coetáneas, de ahí un ritmo pausado (que no necesariamente aburrido) y un tono por momentos más melancólico que terrorífico. Más allá de esta proximidad, por llamarla de alguna manera, When the lights went out no sabe o no puede trascender las limitaciones del guión firmado por el propio realizador tras una ardua tarea de documentación: la acción avanza a partir de la suma de tópicos y lugares comunes de nula capacidad de sorpresa, cayendo en su punto más bajo durante la celebración, en un falso clímax final, de un exorcismo de ribetes casi paródicos (el padre de familia, de hecho, llegará incluso a chantajear al sacerdote del pueblo para que los ayude en su desigual batalla contra el Mal).


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