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publicado el 30 de septiembre de 2008

Sitges 2008: El género que triunfa en tiempos de crisis


Martyrs

El Festival Internacional de Cinema de Catalunya, Sitges 2008 afronta su 41 edición volviendo a las esencias del fantástico y reivindicando un género al que parece que le sienta bien el ambiente de crisis, con un amplio respaldo del público y la crítica y recaudaciones millonarias de la mano de grandes éxitos como El caballero oscuro.

A grandes rasgos, el festival ha apostado por el fantástico en todas sus vertientes y ha ahondado en su vocación europea, corriente que ya sigue desde hace un par de ediciones con buenos resultados y algunos descubrimientos (Alexandre Aja o Alexandre Bustillo), además de presentarnos las nuevas corrientes del cine oriental, alejado ya por completo en formas y argumentos de las películas con fantasma de los años noventa y con Corea del sur de protagonista casi absoluto.

En la sección oficial a competición se ha apostado por la diversidad temática y geográfica, además de la diversidad de títulos, que abarca desde el revisionismo de clásicos como el vampirismo en el filme sueco Let the right one in (Tomas Alfredson) hasta propuestas nuevas y extremas como la francesa Martyrs (Pasqal Laugier) o Vinyan del siempre interesante Fabrice du Welz (autor de la genial Calvaire y que pasa por ser un remake inconfeso de Quien puede matar un niño de Narciso Ibáñez Serrador). Este año se presentan también algunos filmes muy personales como Blindness, una adaptación de "Ensayo de la ceguera" de José Saramago a cargo de Fernando Meirelles o La possibilité d’une ile, una adaptación que el controvertido escritor Michel Houllebecq ha hecho de su novela. A modo de bisagra entre Europa y Oriente nos encontramos el filme Tokyo!, hecho a tres manos entre Michel Gondry, Léos Carox y Bong Joon-ho.



Las producciones del continente asiático que participan este año en Sitges son en su mayoría de Corea, a excepción de la película japonesa de animación The Sky Crawlers, de Mamoru Oshii, y Crows Zero, de Takashi Mike. En la vertiente coreana encontramos tres filmes vigorosos y de facturas visual potente: son The Good, The Bad, The Weird, un atípico western coreano que rinde un homenaje arrebatado y espectacular a Sergio Leone de la mano de Kim Jee-woon, The Chaser, un thriller realista y tremendo de Na Hong-Jin con remake americano a la vista y Hansel and Gretel, una revisión muy libre del clásico a cargo de Yim Phil-sung.

Otras propuestas interesantes del festival son Surveillance de Jennifer Lynch, la hija del autor de Inland Empire, Red, de Trygve Allister Diesen y Lucky McKee que siguen con su cine americano muy independiente, Your Name here, de Mathew Wilder, que intenta ahondar en la mente del escritor de ciencia ficción Philip K Dick. También se presentan a concurso Tale 52, The broken, The burrowers, Eden Lake, The Cottage, Fighter y Absurdistan.

Las producciones españolas en la sección oficial son Prime Time, de Luis Calvo Ramos, que aborda los límites de los reality-shows y SexyKiller, de Miguel Martí, una aproximación pulpera a los crímenes universitarios.

Otras secciones


Philosophy of a Knive

Este año se ha potenciado la sección Noves Visions que acoge propuestas radicales como Deadgirl, Home movie o directamente transgresoras para el género como el filme porno gay Otto; or Up with the Dead People de Bruce la Bruce. También destaca la hermosa Beatiful, de Juhn Jai-Hong un discípulo del realizador Kim Ki-duk.

Noves Visions incluirá una minisección llamada Discovery dedicada a las propuestas más independientes que incluye títulos españoles como Embrion o Versus.

La sección Orient Express presenta las últimas tendencias del cine asiático que pasan por la renovación de las artes marciales (Chocolat) y la autoparodia (Monster X Strikes Back: Attack the G8 Summit). En Anima’t nos encontramos títulos manga como Freedom o Evangelion, al lado de propuestas estadounidenses independientes y experimentales (From Inside, Idiots & Angels…).

Del resto de secciones destaca la puesta en vereda de la siempre controvertida Seven Chances, organizada por la semana de la crítica, que ha optado en esta edición por producciones más afines al género. Destacan de la sección joyas como My Winnipeg de Gay Maddin o Chelsea on the Rocks de Abel Ferrara, director que recibirá además una Máquina del tiempo. También recibirán este premio Lloyd Kaufmann, de la Troma, y el guionista Charlie Kaufmann (que presenta en Sitges su primer filme Synecdoche, New York, fuera de competición). El director John Carpenter es el tercer premiado, aunque su poca disponibilidad para viajar ha obligado a la organización a entregarle el premio en su casa de Los Ángeles. De los premiados de este año destaca también la Maria Honorífica para el productor Jose Anton Pérez Giner, responsable de títulos como La noche de Walpurguis.

Ciencia Ficción

Esta edición del festival de Sitges ha optado por el homenaje. Se rinde tributo a 2001: una odisea en el espacio por su 40 aniversario mediante la entrega del Gran Premio Honorífico a su viuda (Christianne Kubrick) y se aprovecha para rendir homenaje al género con proyecciones de clásicos como El planeta de los simios, El hombre con rayos X en los ojos, Encuentros en la tercera fase o La fuga de Logan. Destaca, por su rareza, El hombre que cayó a la tierra, protagonizada por David Bowie en un apropiado papel de extraterrestre.

También se homenajea al clásico King Kong de 1933, que cumple 75 años y La noche de los muertos vivientes de George A. Romero, quien, por cierto, visita el festival por segundo año consecutivo y encabezará una particular marcha zombie por las calles de la ciudad.

Guía para ir por Sitges

Además de los clásicos (el ciclo de Ciencia ficción, King Kong...), un valor seguro para moverse por la variopinta programación de Sitges, el cine coreano se ha convertido en una apuesta ganadora con sus filmes potentes y arrolladores (The Chaser; The Good, The Bad, The Weird...).

El cine francés nos trae la polémica, la violencia y la sangre explícita con títulos como Martyrs o Vinyan y este año se espera mucho también de un filme sueco que gana a crítica y público en cada festival que visita: Let the right one in. También vale la pena pasarse por la sala Tramuntana para ver el último trabajo de Guy Maddin, dicen que el mejor: My Winnipeg. Para amantes de lo realmente divertido destaca Repo! A genetic opera, una suerte de musical heavy gore con Paris Hilton; y JCVD, una biografia sui generis de Jean Claude Van Damme protagonizada por él mismo. Si lo que se quiere es una apuesta radical, lo más extremo con diferencia es Philosophy of a Knife, del realizador soviético Andrey Iskanov, una descripción minuciosa de 250 minutos de los experimentos genéticos que efectuaron los japoneses durante la Segunda Guerra Mundial. Para rarezas escondidas en la programación proponemos The objective, el segundo trabajo del desaparecido Daniel Myrick, uno de los creadores de The Blair Witch Project y Southland Tales, del cineasta Richard Kelly, autor del filme de culto Donnie Darko.

Un festival que tiene que crecer

"Ganar tamaño", este es el principal objetivo que se ha propuesto la Fundación que organiza el festival de Sitges y asó lo expresa su vicepresidente, Antoni Lladó, director general del Instituto Catalán de Industrias Culturales. Para Lladó, la crisis actual se manifiesta en un mercado de patrocinadores en retirada de los festivales y el tamaño hará que Sitges gane atractivo para éstos.


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